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El kit digital es una iniciativa realmente útil. Tiene sus luces y sombras, no lo podemos negar, pero es una herramienta más que válida para que muchos negocios accedan a la transformación digital . 

Si la semana pasada, te contábamos aquí, qué nos habíamos encontrado cuando algunas empresas querían entrar de lleno en el mundo digital. Hoy queremos ir un paso más allá y explicar, qué puede hacer por ti el kit digital y alguna cosilla que igual no tenías claras y que pueden ser una molestia. 

Es indudable, que el kit está ayudando a muchas empresas, a otras no tanto, quizás son las mismas empresas, a veces por desconocimiento a veces por desdén , las que no lo están empleando bien. 

Me explico. 

No te resultará difícil encontrar a alguien que haya usado el kit digital para renovar una web y ya. No hay estrategia detrás, no hay ningún interés real por hacer de esté, ya no su principal canal de ventas, si no uno funcional. 

Lo decíamos el otro día, es solo un «pillo sitio» y sintiéndolo mucho, no vale. 

Un coche, por bueno que sea sin energía, no se mueve. Primero necesitas un objetivo y a partir de ahí planificar cómo lo vas a conseguir, establecer hitos y situaciones de análisis técnico. Puede sonar a palabrería barata, pero en realidad, es pensar y ver si lo que estás empleando tiempo y dinero sirve para algo. 

Puede que la web necesite un lavado de cara, pero ¿Has pensado en introducir un sistema de gestión de stock? ¿Te convendría un CRM para gestionar bien a tus clientes? Si tienes una buena estrategia, es posible que busques crear una base de datos de compradores recurrentes, sobre la que trabajar para ser más rentables.

Para esto debería emplearse el kit digital. Los agentes digitalizadores , tenemos la responsabilidad de asesorar al usuario de cuál es la mejor manera de rentabilizar los esfuerzos. Tanto si están subvencionados como si no.  Si contactas con nosotros, no solo tendrás un catálogo de soluciones, sino que analizaremos contigo cuál de ellas te es necesaria y cuál se adapta mejor a tu negocio. 

Cosillas que no todo el mundo sabe y pueden ser una sorpresa desagradable. 

La subvención no cubre los impuestos. Esto significa que el IVA lo paga el usuario. Puede parecer de Perogrullo, pero no iba a ser la primera vez que pasase que alguien piensa que lo cubre todo. 

El kit tributa como rendimiento del trabajo. Ojo con los Impuestos de Sociedades o los IRPF. Al tributar como un ingreso más, hay empresas a las que les hace un pie agua. Es importante tener la previsión de esto, no queremos ahogarnos en impuestos. 

Por último, lo más difícil y lo que suele ser complicado que el usuario entienda. El kit es una ayuda, no significa que con el importe llegue para todo lo que hay que hacer, o que se tenga que gastar íntegro. Si necesitas A y B , tiene el mismo sentido hacer C que dejar B a medias. 

¿Y tú? ¿Has pedido el kit digital? ¿Cómo lo has implementado? ¿Has tenido una mejora real en tu proceso de ventas? Si, todavía no has ni empezado, no lo dudes, consulta con nosotros. 

 Aquí, te informamos y ayudamos a gestionar tu kit digital sin obligaciones ni compromisos.